La primera vez que escuché hablar del Kiosko Roca fue días antes de visitar por primera vez Punta Arenas, hace ya casi siete años. Lo primero que me aclararon fue que este lugar no era un puesto de diarios ni revistas, sino una tradicional picada gastronómica, un imperdible de la capital de Magallanes.
Lo segundo –y lo más importante- tenía que ver con la preparación más popular de su carta, que a primeras podía parecer extraña, pero que, apenas la probara, mi sentido del gusto entraría en una dimensión inexplorada. ¿Saben de qué se trataba? De un choripán acompañado nada más ni nada menos que de una leche con plátano. Sí, leyó bien. Longaniza y leche.
El Roca, como les comenté, es un clásico. El negocio es pequeño y, para quien no lo ha visitado, puede pasar desapercibido. Una vez dentro, lo primero que llama la atención es la enorme colección de banderines, camisetas y posters del club Universidad de Chile.
Debo reconocer que, siendo un confeso hincha colocolino, estar rodeado de tanta publicidad “bullanguera” al principio me desconcertó. Pero esta sensación se esfumó apenas conocí a la cariñosa y carismática Rosario Rodríguez, quien fue su administradora por más de tres décadas hasta su lamentable fallecimiento, en 2016.
Inaugurada en 1932, durante 15 años ocupó un edificio emplazado en el corazón de la ciudad, junto a la catedral y la Plaza de Armas. En 1947, se trasladó hasta la calle Roca, donde ha funcionado ininterrumpidamente desde entonces.
Sin bien por aquel tiempo el sándwich de chorizo estaba en la carta, no fue sino hasta mediados de los 70 cuando la leche con plátano irrumpió en la receta, convirtiéndose con el paso del tiempo en un clásico de la región. El resto es historia.
Seguramente se deben preguntar cómo es el choripán con leche con plátano. Mi respuesta es categórica: increíble. La combinación de sabores es difícil de explicar con palabras. Lo único que puedo afirmar con propiedad es que, cada vez que voy a la ciudad, siempre me hago un tiempo para visitar el Roca.
Con el paso de los años, la fama de este restaurante trascendió las barreras geográficas y se hizo conocido en todo el país. De hecho, en 2012 fue galardonado como la mejor picada de Chile, título otorgado nada menos que por el Ministerio de Cultura y las Artes.
Este premio fue el impulso que necesitaba la familia para crecer y probar suerte en otras latitudes. Actualmente, el Roca tiene una sede recientemente inaugura en el centro de Santiago, a pasos de la Plaza de Armas. Como ven, no es necesario viajar hasta el último rincón del mundo para dejarse seducir por esta exótica preparación.
El Roca es la manifestación viva de la calidez y hospitalidad del pueblo magallánico. Allí, los sabores, la alegría y la camaradería forman parte de un todo. Aunque la querida Rola ya no está con nosotros, su legado está más vivo que nunca. Su pasión, su esfuerzo, su entusiasmo son valores que transmitió a su familia, cuyos integrantes han tomado la posta para llevar a este mítico kiosko al sitial que merece.
Datos de contacto
- Pdte. Julio A. Roca 875, Punta Arenas, región de Magallanes
- Hermanos Amunátegui 528, Santiago centro, región Metropolitana
- Punta Arenas: +56 61 222 3436
- Santiago: +56 2 2944 4955
- Horario: de lunes a viernes, desde las 07:00 hasta las 19:00 horas. Sábados, de 08:00 a 13:00 horas
- Sitio web: www.kioskoroca.cl
Tuve el honor de ir al Kiosko Roca en agosto 2019 y fue una experiencia inolvidable. Lo es hasta hoy y espero volver cuando acabe esta pandemia… Pero en Punta Arenas. Un abrazo y lamento la perdida de la sra. Rola. No sabía hasta hoy.