Infaltable durante las fiestas de fin de año, el “cola de mono” es toda una institución en nuestro país. Acompañado de un buen trozo de pan de pascua, esta aromática y dulce bebida es sinónimo de paz, fraternidad y alegría.
Aunque a ciencia cierta es imposible determinar con exactitud su origen, los estudiosos en la materia apuntan al círculo de confianza de quien fuera Presidente de Chile a comienzos del Siglo XX: Pedro Montt. El mito dice que, en una oportunidad, su Excelencia se encontraba en casa de la señora Filomena Cortés celebrando una fiesta junto a un grupo de amigos. La noche había sido intensa, regada, republicana y nadie, a excepción del mandatario, quería que terminara. Por eso, cuando Montt decidió de que ya era hora de regresar a sus aposentos, los distinguidos contertulios, como medida desesperada, escondieron su revolver colt y lo convencieron para que se quedara un rato más.
Como ya no había con qué brindar, alguien tuvo la brillante idea de meter el poco aguardiente que quedaba en un jarrón con contenía café, leche y azúcar. Contra todo pronóstico, la combinación fue un verdadero milagro etílico. Desde entonces, este brebaje se convirtió en un símbolo de nuestro país, la demostración más contundente de que la unión hace la fuerza. Salud por eso.
Aunque sencilla, preparar esta receta exige precisión y buen gusto. El primer paso es poner a fuego lento leche, cardamomo, canela, clavo de olor, nuez moscada, café y algo de azúcar. Una vez hervida, el elixir debe enfriarse antes de antes de agregar vainilla y su ingrediente esencial: el aguardiente.
¿Por qué esta bebida se consume durante las fiestas de fin de año? También es un misterio que probablemente nunca será resuelto. Lo que sí está claro es que en toda familia siempre hay al menos una persona que conoce la receta y que, a la hora de celebrar, siempre llega a la celebración premunida de varias botellas bajo el brazo.
Si bien con el paso de los años este tradicional licor ha cedido terreno frente a otras bebidas, todavía hay algunos bares y restaurantes que tienen el “cola de mono” en su carta, disponible para disfrutarlo los 365 días del año. Aquí, el listado.
Confitería Torres
Este tradicional restaurante, fundado en 1979, es un verdadero museo gastronómico. Situado en plena Alameda, y a pocos metros del Palacio de La Moneda, hay quienes afirman que precisamente en este lugar se dio origen a la bebida. Según cuenta la historia, uno de sus garzones preparaba a hurtadillas este licor, que distribuía clandestinamente en botellas de “Anís del Mono”, marca en cuya etiqueta aparecía un primate de cola larga.
Dirección: Alameda 1570, Santiago, Santiago Chile
Teléfono: + 56 226880751
Bar La Providencia
Que haya sido inaugurado en 2019, no quiere decir que su carta prescinda de preparaciones tradicionales. El aromático “cola de mono” que allí sirven es la mejor prueba de ello. Ubicado en uno de los sectores más tradicionales de Providencia, la receta de esta bebida es bien casera, aunque le han incorporado algunos toques para darle un aire más refrescante. Además del aguardiente, la preparación incluye leche de almendras, una pequeña cuota de vodka, goma y licor de café. Quizás los puristas arisquen la nariz antes de probarlo, pero una vez que el licor recorre la garganta todo ese escepticismo se esfuma de golpe. Una grata sorpresa.
Dirección: Avenida Francisco Bilbao 944, Providencia.
Teléfono: +56 9 76997934
Bar Nacional
Seis décadas de tradición tiene el Nacional, uno de los bares con más historia del centro de Santiago. Si bien este lugar cuenta con cuatro sucursales, para dar con su “cola de mono” hay que visitar con el local de calle Bandera.
¿Su sello? El toque dulce, que contiene el intenso saber del aguardiente. El Nacional lo ofrece en dos modalidades: en un vaso “wishkero” para los valientes; y en un “barrilito”, una medida un poco más pequeña, parecida a la del pisco sour, pero igualmente chispeante.
Los asiduos a Nacional suelen el pedir el “cola de mono” como aperitivo, acompañado nada menos que de una empanada de pino. Y aunque a buenas y a primeras pueda resultar desconcertarte, al combinar los sabores descubrirás que ambos productos conviven en perfecta armonía.
Dirección: Bandera 317, Santiago, Región Metropolitana.
Teléfono: +56 226953368
Bar Catedral
Aunque su historia es reciente, el Catedral aparece en cualquier listado de bares en Santiago que debes visitar al menos una vez al año. Frecuentado por artistas y figuras públicas, su onda es incuestionable. Tampoco lo es su “cola de mono”, que se ofrece en “copa” a $2.500 o en “jarra”, cuyo precio es de $8.000.
Que sea un lugar de moda en ningún caso quiere decir que sus recetas carezcan de historia. Sin ir más lejos, la receta de la “cola de mono” del Catedral es centenaria y proviene de la región del Maule. Leche entera y aguardiente de Chillán, combinada con un molido de café molido, clavo de olor, canela y vainilla, dan como resultado un producto cremoso y suave, ideal para beber en frío.
Dirección: José Miguel de La Barra 407, Santiago.
Teléfono: +56 226643048